Escribe César Pradines:
Nadie como Fats Fernández representa más cabalmente al jazz en la Argentina.
Trompetista emblemático, con casi cincuenta años en los escenarios locales ("En algún momento de este año los voy a cumplir", dice), tiene una historia que lo vincula con su instrumento desde su infancia, en el barrio de La Boca.
Su historia es un ejemplo de vocación. Con pocos años, menos de seis, se ubicaba al lado de los cornetistas de cuanta banda aparecía por su barrio, un mundo de fuerte inmigración, donde la música tenía una presencia permanente. Hizo lo que en su época se llamaba primero inferior en el colegio San Juan Evangelista de la Obra de Don Bosco, a sesenta metros del café Roma, en Olavarría y Almirante Brown, y eligió para la entrevista precisamente ese lugar, un territorio en el que juega de local. "River nos podrá ganar, pero no tiene un trompetista así", le dice a LA NACION un parroquiano que parece apreciar tanto el fútbol como el jazz. Como otros, él valora en toda su dimensión a este músico que el mismísimo Wynton Marsalis ubicó entre los diez mejores trompetistas de los años noventa, un lugar de honor para este artista fanático de Boca Juniors y de los canelones de Gisella, su compañera de toda la vida...
Continúa en http://www.lanacion.com.ar/384110-el-trompetista-de-la-mitad-mas-uno
Que buena foto! amo a boca ♥
ResponderEliminarWonderful music! Through your blog posts i find out about all these excellent Argentinian jazzistas!
ResponderEliminarDid you use one of your old records for the collage above?
@ Lucia:
ResponderEliminarAmamos a Boca. La ventaja del gordo en estos momentos difíciles es que tiene una trompeta a mano para descargar la tristeza.
@ Dodo:
Actually I stole it from the web. (But it´s a secret between us. Don´t tell anyone)
sii pero no importa . dio bronca pero nadie puede decir nada de nada (ningún equipo argentino) , jugo mal si es verdad. Teníamos mucho fe todos en que iba a ser fácil ganarla pero no se dio.. Orgullosa de ser del mas grande ♥
ResponderEliminarMuy bueno para este desayuno.
ResponderEliminarAl gato le encantó, se acomodó debajo del acolchado y acompañó con ronrones, que aún perduran.
A ver que más encuentro por youtube.
Saludos!
@ cr:
ResponderEliminarMuy bien por ese gato, caramba!!
Le gusta el jazz y seguramente es bosterito; mis bendiciones para el y para vos mil gracias por pasar.
Saludo!!